sábado, diciembre 31, 2005

Del porque el silencio...



Y barriste con lo poco que te quedaba de dignidad
Bah! Dignidad, palabra de malditos
tu la conocías fuiste criada con ella, ¿o me equivoco?
deseaste tantas cosas, tantas ilusiones, mezquinas
egoístas, fuente de hipocresías... mentiras
llamabas amigo aquel que te tendiera la mano
y mordías su mano al menor descuido
pequeña serpiente del paraíso,
teatro bendito, comprada,
gente sin más, no-individuo, joven títere,
perdiste tanto al entrar al juego,
te perdiste tu, la fuente de tus males.
Ni con ellos, ni sin él,
te perdono y te juzgo;
pero no olvido,
prefiero recordar día con día el porque mi silencio,
que caer de nuevo en tu mundo de falacias
y falsa entrega.

Destino,s.Justificación del crimen de un tirano; pretexto del fracaso de un imbécil.
(Ambrose Bierce)

1 comentario:

Ana Bolena dijo...

animal rastrero, desecho de la vida...lo digo y lo sostengo....rata de dos patas te estan hablando a ti.