Es ahí, en el momento en que pienso huir, que apareces de nuevo. Me detienes, todo tú, eres mi red, mi anzuelo, no me dejas escapar, me atrapas totalmente y me dejas inmóvil. No quiero huir de nuevo. Desaparecer, de mi mente se borra esa idea, así pienso en ese instante, aunque sé que mañana, cuando digas que me dejas, empiece a empacar mis maletas y tire la moneda que decida a que lugar iré esta vez. Pero eso será mañana, ahora no importa nada. Por el momento todo es perfecto, nos entregamos mutuamente, las palabras y los cuerpos están presentes, yo lo siento, tu, no lo sé, aunque quisiera saberlo. Quisiera saber a donde tu mirada se dirige cuando estas pensativo, que palabras murmuras cuando hablas de frente, que sueñas cuando duermes, cuando estas despierto, ¿acaso sueñas? en quien piensas el resto del día; en los momentos en los que no estas conmigo, quisiera saber si piensas en mi cuando estamos juntos, ¿en que piensas? Quisiera saber tus metas, tus anhelos, tus miedos, tu ...